lunes, 17 de diciembre de 2012


Adam Lanza, autismo o diagnosticismo

I
Hará pronto 60 años, en Enero de 1953, que Derek Bentley un muchacho de 19 años, que hoy sería descrito como deficiente intelectual, fue ahorcado en la prisión de Wardsworth, Reino Unido, por un crimen que no cometió. Su ejecución dio fuerzas a los que luchaban contra la pena de muerte y su figura ha sido homenajeada en documentales, cine y varias canciones pop de las que destacaré la de Ewan McColl Derek Bentley, y la de Elvis Costello,  Let him dangle.

La deficiencia intelectual de Bentley  estaba posiblemente relacionada con el daño sufrido cuando fue sepultado en el derrumbe de su casa durante un bombardeo alemán en la 2ª Guerra Mundial y los numerosos problemas de salud de niño. Con una escolarización problemática que incluía tres años en una institución-reformatorio y de la que salió sin saber leer o escribir, sin trabajo después de haber sido despedido de barrendero, se unió a Chris Craig, un delincuente 3 años más joven que él, en un intento de robo de un almacén en Croydon cerca de Londres.

Craig, obviamente el líder, se había procurado una pistola a la que serró el caño, y de varias balas de diverso calibre que arregló  y limó, y dio a Bentley una navaja que éste nunca usó. El robo fue interrumpido por la policía que detuvo a Bentley, pero Craig intentando escapar, hizo varios disparos que fueron devueltos por la policía en una refriega en la que resultó muerto uno de los agentes. Craig, el autor de los disparos, al ser menor no podía ser condenado a muerte,  pero Bentley sí.

Derek Bentley. Foto: wikipedia
Varios hechos hacían dudosa la culpabilidad de Bentley.  El no resistió el arresto, y la evidencia balística era dudosa: la bala mortal nunca se encontró y pudo haber salido de una de las pistolas de la policía y no de la de Craig. La frase en que se basaba la acusación,  Let him have it, que la policía dijo haber salido de los labios de Bentley, ya atrapado, y que Craig siempre juró no haber oído, pudo significar dos cosas: Dale, o dásela, es decir “dale un tiro” o “dale la pistola”. El juez escogió el primer significado.

Ni más de 200 peticiones de perdón de parlamentarios ni la de la misma Reina pudieron  evitar la ejecución. Todo apunta a que un sentimiento de venganza corporativa policial, así como las direcciones al jurado de un juez compelido por un fiscal notorio por su ferocidad que llevó a condenas que más tarde fueron probadas erróneas, más algunos prejuicios, Bentley además de “retrasado” provenía de una familia católica humilde, sesgaron fatalmente la investigación y el jurado. La condena fue revocada 45 años más tarde, en 1998, gracias a la lucha de la hermana de Bentley, Iris.


II
Los sentimientos de ira corporativa o colectiva y la influencia de sectores  de poder que quieren mantener sus intereses, suman una fuerza poderosa que evita la búsqueda de respuestas reales y las “encuentra” donde no existen. No es imposible que Adam Lanza, esté afectado de un síndrome de Asperger, una forma leve de autismo, como ya han diagnosticado los periódicos americanos, y de manera más irresponsable, sin tener una historia del desarrollo temprano o una narrativa mínima del sujeto o sus cercanos, ha aventurado algún agente de la psico-industria americana. Si estuviera de moda la personalidad narcisista, o la esquizoide, serían estas a las que se apuntaría, pero hoy en día es en los trastornos del espectro autista o TEA, donde se buscan “respuestas” y donde está el mercado.

Adam Lanza. Foto intenet
El diagnóstico de los TEA en niños,  ha aumentado en más de un 1000X100 en los últimos años en los USA y está aumentado espectacularmente en otros países desarrollados. Uno podría sospechar que una de las razones es que se está  diagnosticando algo diferente de lo que describió Kanner. Los datos del Centro de Control de Enfermedades americano que nos dicen que la deficiencia intelectual afecta hoy solo al 25% de los diagnosticados de autismo y no al 80% como hace 10 o 15 años, apuntarían a que son los criterios diagnósticos los que se van ampliando hacia lo normal, proveyendo esta ampliación soluciones para muchos gustos, sin que esto quiera decir que el pronóstico, servicios o derechos de los afectados de autismo clásico o de Kanner adultos, los “rainman”, hayan mejorado.

La “falta de empatía” es uno de los leitmotifs de esta expansión. Pero en mi opinión las deficiencias en empatía de los afectados de autismo y síndrome de Asperger son de origen cognitivo, no afectivo o moral. Y si las deficiencias en empatía fueran patognomónicas de los TEA, habría que concluir que un sinnúmero de políticos, banqueros, y bastantes periodistas, académicos  y burócratas, sufren de esos trastornos. Personalmente me cuesta imaginar o a un “aspi”, y no digamos a un “kanner”, seguir todos los pasos necesarios, anticipar juguetonamente, (véase la fotografía), armarse, conducir un coche, eludir porteros,  etc,  para llevar a cabo lo de Newtown. Si la falta de empatía discapacita a los afectados para la reciprocidad amorosa, también lo hace para el odio secuenciado. Los TEA, los de antes, tienden a ser antipáticos, a veces muy antipáticos, pero son incapaces de violencia elaborada.

 Es también posible que Adam Lanza fuera un muchacho tímido, que vivía confusamente el divorcio de sus padres en un vecindario afluente y exclusivo, donde los clichés morales y las maneras gentiles no dejan sitio para la expresión de malos rollos; los aspersores riegan los céspedes, el chardonnay y el zoloft las anomias. Lo que es cierto es que en la magnífica casa con casi una hectárea de jardines, donde Adam vivía solo con su madre, había varias armas de fuego con las que los dos practicaban juntos.  Estaban allí para defenderlos de excluidos y desposeídos, quizá como Bentley o Craig, que osaran amenazar sus posesiones.

La respuesta a la cuestión de porqué hay tanta violencia sangrienta en los USA, no se encontrará con un creciente número de diagnósticos y tratamientos – se lee en la red que más del 6% de los adolescentes americanos toman ya antipsicóticos- sino en el enorme número de armas de fuego en los hogares.  Si Adam Lanza no hubiera tenido acceso a armas de fuego,  quizá la hubiera emprendido a pedradas y es improbable que hubiera matado a alguien, aunque claro eso de las pedradas hubiera estado muy feo en Newtown. Allí lo guay son las  armas, armas que para defender posesiones, desposeen a esos defensores de lo más necesario para la paz: un corazón más presto a dar que a tomar. 

1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo
    Una persona con TEA puede ser violento en cualquier momento ,tirar mesas ,sillas ,todo aquello que se encuentre a su alrededor
    -NO LE HA ENSEÑADO NADIE A TENER ESTAS REACCIONES
    -NADIE LE HA ENTRENADO PARA USAR UN CUCHILLO COMO DEFENSA
    -TAMPOCO UN ARMA O VARIAS ,PRACTICANDO TIRO CON SU PADRE ,MADRE O ABUELA
    -NINGUNA PERSONA RESPONSABLE DE SU EDUCACIÓN ,SEGUIMIENTO DE SU TRASTORNO ETC...LE OFRECE HERRAMIENTAS ,TANTO INDIVIDUALES ,COMO EN GRUPO ,EN FAMILIA O INSTITUCIONES ETC...PARA SER MAS VIOLENTO ..TODO LO CONTRARIO ..LAS PAUTAS A SEGUIR SIEMPRE VAN DIRIGIDAS
    -Al AMOR
    -A LA EMPATÍA
    -A MODIFICAR POCO A POCO PAUTAS DE CONDUCTA ,BIEN SEA "ACCIÓN RECOMPENSA -RECONOCIMIENTO DE ESFUERZOS ETC.
    -SIN CAMBIOS BRUSCOS EN SUS TAREAS ,RUTINAS ,PORQUE SU RITMO LES AFECTA DE UNA FORMA DIFERENTE A LOS NIÑOS ,JÓVENES ,ADULTOS ...LLAMADOS "NORMALES "
    -ADAPTAR BASTANTE ,NO EN TODO ,LA VIDA DE LOS CUIDADORES A LA SUYA ETC...
    TODAS ESTAS PAUTAS NO DIFIEREN EN MUCHOS ASPECTOS DE LA EDUCACIÓN- FORMACIÓN
    CUANDO TENEMOS HIJOS "NORMALES "



    ¿pero cómo se atreven a publicar que són capaces de elaborar un asesinato en masa ?
    a planificar ,matar primero a su madre ,o cualquier persona que estuviera en la vivienda ,tomar el coche ,cargar las armas en él ,dirigirlse a un lugar concreto ...disparar desde las primeras personas que encuentra ,continuar sin ningún tipo de "selección " ..hasta que la policia llega ...y TAMBIÉN DECIDE DISPARARSE ÉL .

    ¿NO CORRESPONDE ESTA CONDUCTA CLARAMENTE A UN PSICÓPATA ?

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